Situación actual de las tecnologías

Las tecnologías aportan un gran beneficio a la sociedad como por ejemplo el fácil acceso y el manejo de todo tipo de información, como así también una rápida comunicación. También, aportan un gran beneficio para el aprendizaje ya que estimula el desarrollo de la imaginación o permite que las materias sean más interesantes. Sin embargo, las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) han cambiado el estilo de vida y hoy en día nos convierten en seres dependientes de las mismas por su uso frecuente y no moderado, que ocasiona, en algunos casos, que consideremos la tenencia de un celular como un instrumento fundamental para la vida. Incluso, nos puede llegar a provocar que tengamos cambios de humor constantes, que poseamos de una necesidad de estar “en línea” en todo momento, que nos aislemos socialmente, entre muchos otros síntomas. 

Debemos considerar algunos aspectos que indican la posible dependencia o el uso problemático de las nuevas tecnologías y que pueden dar como resultado una adicción. Los más importantes que considero son: dormir menos de siete u ocho horas (ya que es lo indicado para la salud), dejar de lado otro tipo de actividades como el estudio, las relaciones familiares y sociales o la salud, actuar de una manera irritable cuando la red no nos funciona o lo hace de una manera lenta, perder la noción del tiempo, disminuir el rendimiento escolar y sentir una euforia anormal cada vez que nos conectamos.

Tenemos que entender que esto se ocasiona debido al mal uso que les damos a las tecnologías, ya que siempre su propósito fue ser una herramienta o una ayuda para el ser humano y no un destructor. El ser humano se ha vuelto cada vez más dependiente de las mismas y es por esto que debemos aprender a utilizarlas para que nos brinden beneficios, competencias, aprendizajes y, sobre todo, un buen uso del tiempo en las tecnologías. En estos tiempos de confinamiento, una provechosa actividad puede ser aprender nuevos empleos u oficios, mediante capacitaciones vía internet y tal vez así, mejorar nuestra situación económica y también nuestro bienestar. 

Debemos fomentar que no se pierda nuestra capacidad de socializar y una manera de hacerlo es aprovechando, por ejemplo,  las videollamadas ya que nos hace falta ver a las personas de la manera que se pueda y no vivir a base de la mensajería, donde se nos hace casi imposible podernos expresar de la verdadera forma en que sentimos. 

Esta adicción podemos tratarla mediante nuestra propia voluntad y la ayuda y el apoyo de nuestros familiares, nuestros amigos y profesionales de psicología, si es que llega a ser necesario. Algunas de las formas de hacerlo pueden ser dejar de utilizar el celular una hora antes de dormir para relajar nuestra mente y como sugerencia, hacer un balance del día, fomentar la relación con otras personas de tu mismo lugar en el cara a cara o leer un libro. También, podemos empezar a considerar las aplicaciones esenciales para utilizar así no malgastamos nuestro tiempo y de este modo, potenciar la lectura, el deporte, u otras aficiones que nos despejen. Otro aspecto a considerar puede ser proponernos no ver el celular (notificaciones, mensajes, etcétera) por determinadas horas y mantenerlo en silencio.

No debemos olvidar el aire libre, que nos ayuda a escapar de nuestra realidad virtual por un momento. Todo esto repercutirá de forma negativa en nuestro futuro, en cuanto al nivel de salud y al nivel de predisposición de hacer las cosas, si no empezamos a actuar desde ahora. Aún estamos a tiempo y podemos evitar estas consecuencias, sobre todo nosotros, los niños, niñas, adolescentes y jóvenes.

 

Escrito por:

Juana Salonia, CORIA Argentina.

 

Fuentes: